sábado, 30 de agosto de 2008

Día 8


Mi colega -¡Tio! ¿Te das cuenta? En las olimpiadas es donde estan los mejores especímenes de la raza humana " la crème de la crème".

Yo
- ¿Ah si?

Mi colega - Si tio, piensalo, están los que mas corren, los mas rápidos, los que mas saltan, los mas fuertes...lo mejor de lo mejor.

Yo - ¡Tronco! ¡no tienes ni puta idea! ¿Y donde dejamos a las mentes pensantes en todo esto de la evolución? ¿Acaso no es el cerebro lo que nos hace diferentes y no la fuerza?

Mi colega -Ya, claro, pero tú ¿con quien echarías un polvo para que la especie evolucionase,¿eh? ¿con el cerebrito o con el deportista?

Yo
-Mira, si echo el polvo aquí lo único que iba a evolucionar soy yo, así que lo que yo haga a la evolución se la suda.


Mi colega
-No contestas,¿eh?


Yo -¡Anda y que te jodan!


Mmm...no se...algo me chirría en toda esta teoría de la evolución, algo falla.

5 comentarios:

Laura dijo...

En la variedad está el gusto, supongo, y a cada ocasión lo suyo. ¿No puede haber un cerebrito deportista? Sería ideal...
Saludos.

Thiago dijo...

Bueno, yo creo que no falla nada. Cada uno explota lo que tiene, unos la mente y otros el cuerpo... ¿qué es mejor? no se... Aunque los podemos perfeccionar cada uno, la genética es la genética, jajaja. y los dos envejecen bastante mal, la verdad.

Bezos y gracias por tu visita.

Anónimo dijo...

Lo mejor de la raza humana está en las universidades, donde queridos amigos, podéis encontrar tios cachas con futuros por delante. Al que quiera encontrar un chico que se dé una vuelta por alguna de las universidades españolas, jiji.

Thiago dijo...

Qué tal? sigues estudiando? Cuándo te examinas? todo el mundo los tenía estos primeros días...

Venga, suerte y bezos

EcRaSe dijo...

Laura: haberlo lo habrá, pero seguro que ya está pillado

skywise: si que los hay si, que lo tengo comprobado, pero suelen ser heteros, que guapos listos y gay eso es mas chungo.

thiago: estoy hasta el 11, asi que todavía me quedan unos días, pero espero que ya sea el último septiembre...cruzaré los dedos